20. Indigo Blue Story

Al despertar, Flowery buscaba su vestido pero al encontrarlo en pedazos sonrío al recordar lo que había pasado durante la noche y no pudo evitar sonreír ruborizada; usó una de las delicadas sábanas para cubrir su cuerpo y buscar otro vestido. Ahora estaba feliz y radiante pues estaba más unida que nunca a Kamijo, ya no le importaba lo que fuera, lo amaba y eso era suficiente, pero puso mirada melancólica cuando recordó que tendría que irse.

Aquella mañana Teru fue a buscar a Helena pues irían a ver a Vamaranth y Masashi respectivamente, él llevaba un obsequio para su niña envuelto en papel plateado con un hermoso moño con listón azul, por la forma se deducía que se trataba de una pintura no muy grande. Lo que no se dieron cuenta era que Mark los observaba y pensaba en aquella rosa que había encontrado en la casa se Helena... ¿se la habrá dado Teru? De alguna forma se había enterado que cuando ellos salían tardaban horas en volver lo que lo hacía sospechar de alguna manera de Teru a quien apreciaba mucho por haberse quedado huérfano a una temprana edad al cuidado de sus tíos y cuidándolo hasta que a los quince años tuvo que marcharse para su educación militar. Igual y tantos años dejando a Helena sola influyó y el hecho de no decirle a Teru sobre los sentimientos de él hacía la bella joven. Pensaba en ir tras ellos para ver si su teoría era correcta pero no lo creyó pertinente así que mejor fue a buscar a Hizaki, seguro ella tendría alguna información al respectos al compartir fuertes lazos con Helena y Teru.

Y en efecto, fue con Hizaki quien estaba acompañada  por Scarlet así que saludo a ambas cortésmente y aceptó la taza de té que la princesa le había invitado.

-Muchas gracias- Agradeció Mark el té que Hizaki le llevó, bebió un sorbo de aquella deliciosa infusión de rosas- Vi a tu primo salir con Helena ¿A dónde iban?

Hizaki dudó, Sacarlet también la miró pues Mark había mencionado a Teru.

-Es que como ustedes sabrán, a mí me encanta cocinar y a ellos mi comida así que me hacen el favor de ir por ingredientes para mí porque realmente no me gusta salir de la aldea, saben que hay cosas que no se pueden conseguir así.

-Espero algún día acompañarlos, me encantaría ir con Helena. -Dijo el chico no muy convencido en lo que le dijo la chica y bebió otro sorbo de té.

-¡Yo también iré!- Mencionó Scarlet con tal de estar cerca de Teru y en la cara de Hizaki se dibujó una mueca de fastidio.

Vamaranth se alistaba pues Masashi no tardaría en pasar por ella, incluso había terminado con sus labores cotidianas desde muy temprano pues quería antes buscar un obsequio para Teru, quería llevarle un lirio blanco.

Tarja le advirtió a su hija que no llegara muy tarde pues en la tarde iría Yuki junto a la modista para ver lo del vestido de novia, la chica se quedó pensando un momento para despedirse diciéndole a su mamá que no se preocupara pues iba a llegar con su prometido, y esto se debía a que después de ver a Teru, Masashi la iba a llevar con Yuki para que no hubiera sospecha de sus salidas. El chico de cabello plateado ya había llegado junto con Helena cuando Vami y el chico Thanatosian llegaron quienes fueron a ver a su persona especial, Vam abrió con detenimiento el regalo que le había dado Teru después de entregarle el lirio y se trataba de una pintura en acuarela de una rosa azul con destellos plateados por lo que la chica abrazó al peliplata con tan entusiasmo que casi lo hace perder el equilibrio. Los minutos pasaron y tuvieron que irse a buscar a Yuki pero no le dijeron a Teru para que no se enfadara.

Cada vez que Yuki podía trataba de besar a Vami pero cada vez sentía más y más rechazo pero no comentó nada para no importunar a su prometida, igual y solo se trataba de nerviosismo debido al futuro compromiso y seguro cuando ya boda se lleve a cabo las cosas cambiarían. Al llegar la modista ya estaba y Yuki fue a hablar con ella pues él correría con la mayor parte de los gastos. La modista, una mujer regordeta pero gentil tomaba las medidas de la chica con una cinta verdosa, se notaba la felicidad de Tarja quien ya estaba ojeando los diseños hechos a lápiz de los vestidos separando los que a ella le gustaban para que su hija pudiera elegir uno de esos. Tuomas estaba en la mesa bebiendo café con Masashi mientras que Yuki estaba al pendiente de su prometida y los detalles que le daba aquella dama que anotaba en una libreta los números obtenidos de sus meticulosas mediciones que a la chica mareaban.

Mientras tanto, Jasmine despertó “temprano” y se encontró con Flowery quien se encontraba tomando un té sentada en uno de los hermosos sillones de terciopelo negro; y se alegró más al ver que la vampiresa había despertado pues se sentía un tanto sola, Jasmine se sentó en un sillón contiguo y la observó sin decir nada, Flow se estaba incomodando y su elegante compañera lo notó.

-A mí no me engañas hermosa Flow… sé que tú y Kamijo ya se reconciliaron- Sonrió.

-¡Así es Jasmine! Por fin entendí que lo que decida mi corazón está por encima de todo, además que entendí que ni tú ni él me harán daño.

-Ven acá.- Jasmine abrazó fuertemente a Flow en señal de amistad.

De pronto Jasmine la sintió pero Flowery sintió que unas manos rodearon su cintura y en efecto, era su amado príncipe vampiro por lo que de inmediato se volteó y besó apasionadamante.

-¿Cómo te sientes amor?- Preguntó la chica humana.

-De maravilla, tú eres la mejor cura.

-¡Ups! Será mejor que me vaya- Decía una Jasmine traviesa.

-¡Espera Jasmine!- Indicó Kamijo- Mañana es el momento de ir a dejar a nuestra hermosa visita pero no quiero que se vaya si antes decirle que a pesar que yo soy un vampiro, quiero que le de cierta paz a su familia en cuanto a nuestra relación así que quiero que se case conmigo bajo la ley humana…

-¡¿Qué?!- Preguntó una emocionada Flowery- ¡Por supuesto!

-Jasmine… podrías buscar el anillo que te di a guardar la otra vez.

-¿El qué era de tu madre?

-Así es.

-¿De tu madre?

-Sí, me lo dio cuando salí de casa… pero bueno, quiero que sea tuyo para que siempre que lo veas recuerdes lo importante que eres para mí.- Jasmine ya había salido.

-Si ya te sientes mejor... pensé que hoy me ibas a llevar a casa…

-Espero me disculpa dulce señorita pero… -se acercó a su oído para murmurarle- No dejaré que te vayas sin repetir lo de anoche…- le confesó con una sensual voz.

-Kamijo… yo… -La chica se sonrojó ante tales palabras- Yo… la verdad es que muero por estar contigo otra vez pero…

Kamijo la cargó tan rápido que la tomó desprevenida y se la llevó a la habitación de la otra noche.

Jasmine tardó unos minutos en llegar con el anillo, pero al no ver a la dulce pareja decidió ponerse a leer un extraño libro muy antiguo pues ya imaginaba lo que pasaba entre ambos y no quería detener ese momento, aquella noche no necesitaba salir a cazar así que se dispuso a leer; pero grande fue su sorpresa al encontrar que ese libro fue escrito por un antiguo vampiro que quizá ya ni siquiera existía donde hablaba de una vampiresa que le robaba el alma a mujeres jóvenes para mantenerse hermosa, pensó en la condesa Bathory pero se dio cuenta que no era ella sino de alguien a la que conocía muy bien y que al parecer había dejado de seducir ingenuas muchachas cuando se enamoró de una de ellas pero que al final terminó por asesinarla sin querer al tratar de beber una de las pequeñas dosis de sangre de costumbre para no matarla pero esa vez no pudo detenerse y el dolor la hizo convertirse en un cruel demonio diferente a los demás vampiros; no cabía duda, esa vampiresa se trataba de Kaya… no quiere pasar la eternidad sola y al ver que no tendrá a un humano se aferró a Kamijo que al ser un vampiro no tendría más problemas  haciendo hasta lo imposible para lograr su cometido, deberían de cuidar muy bien a Flowery, hasta ese momento Kaya no se había manifestado, tal vez estaba reprendiendo muy bien a Alex por haber herido a Kamijo.

Como el vampiro lo había prometido, el siguiente día llevó a Flowery a su casa, aún no le daba el anillo pues quería hacerlo en presencia de sus padres y como era de esperarse al llegar, Tarja les abrió con suma felicidad de ver bien a Kamijo y que por fin su hija volvería de nuevo a casa, y también al tener a alguien tan elegante como Jasmine en su casa; les ofreció algo de comer pero obviamente se negaron.

-Me gustaría hablar seriamente con ustedes.- Indicó Kamijo a Tarja y Tuomas.

-Usted dirá- Autorizó Tuomas.

-Como ya sabrán, yo amo a su hija Flowery- Jasmine cuchicheaba con Vamaranth entre palabras y risitas que se decían al oído felices por el futuro de aquella pareja.- Yo quisiera pedir la mano de su hija.

-¿Qué dices querida Flow?- Preguntó Tuomas a su hija.

-¡Yo también lo amo papá!

-No se diga más, es triste ver que nuestras dos hijas pronto emprenderán sus caminos, pero era de esperarse, cuenta con mi aprobación.

-Y con la mía joven Kamijo.- Tarja también estaba de acuerdo.

Kamijo sacó una hermosa cajita dorada y al abrirla contenía un hermoso anillo de plata pura con una rosa grabada.

-Lamento que no sea de oro o no contenga una gran piedra preciosa, pero este anillo es muy importante para mí pues era el favorito de mi madre y ahora quiero que sea tuyo.- Le colocó el anillo a su nada ante la mirada melancólica de sus padres, Tarja incluso limpiaba sus lágrimas con una pañuelo suave de algodón.

-No importa, el valor que tú le des es más especial que lo que cualquier persona sin conocer la historia puede deducir. –respondió Flowery.

-Y si no es mucho atrevimiento, me gustaría que en una semana se anunciara nuestro compromiso ante todos organizando un baile de máscaras.

-¿Ante todos dice? ¿En una semana?- Preguntó Tuomas.

-Ya veo- Parecía que Tarja también lo entendía.

-El día en que Thanatosians y Philians pueden convivir- Respondió Tuomas- Jamás habíamos ido a una de esas reuniones porque siempre salen mal.

-Lo sé- Indicó Kamijo.- Por eso ofrezco mi castillo que es un territorio neutral para que eso se lleve a cabo, además que será un día de fiesta y no una convivencia cualquiera. Estoy seguro que todos se comportarán a la altura.

-Pero es muy pronto.- Hizo notar Tarja.-Un baile de máscaras se lleva mucho tiempo en organizarlo.

-No se preocupe, estará listo- Contestó Kamijo- En cuanto a la ropa de ustedes, en mi castillo tengo muchos atuendos que pueden quedarles y están en perfecto estado, solo sería que consiguieran su máscara. Mañana mismo para el anochecer tendrán todos invitaciones, tanto Philians como Thanatosians.

-Usted es una gran persona- Admitió Tuomas.

Al salir, Jasmine por fin le hizo un comentario a Kamijo.

-¿no crees que el baile sea arriesgado?

-¿Por qué lo dices?

-Kaya…

-Habrá mucha gente y obviamente no dejaré sola a Flowery ni un solo momento… ya después veo que hacer con Kaya.

-De acuerdo, ya sabes que no te dejaré solo.

-Gracias Jasmine.

En efecto, Kamijo y Jasmine fueron a ver en imprentas de Philians y Thantosians respectivamente para que tuvieran las invitaciones de inmediato, una por cada familia. Podían salir de día pero con poderes muy semejantes a los de los humanos pero no tenían problema con ello, solo necesitaban dinero para acelerar el proceso. Buscaron mensajeros veloces para que repartieran ese mismo día donde cada Philian y cada Thanatosian supieron sobre el compromiso de Flowery con aquel desconocido hombre que habitaba en el castillo en la base del monte y que quería celebrarlo en un ambiente de total armonía entre los clanes aunque sea solamente por unas horas, el requisito único para entrar era portar una máscara o antifaz sin importar si el atuendo fuera caro o no. No habría clases sociales ni clanes, solo personas festejando una fecha especial, y no habrían parejas hechas pues se haría una dinámica para formarlas en aquel día; idea de Jasmine para que Vami estuviera con Teru.

Vamaranth y Flowery fueron al castillo de Kamijo al día siguiente de recibir la invitación formal para ver lo de su ropa, Vami ya había empezado a elaborar máscaras para su familia por lo que buscaba algo que combinara, era de día por lo que ni Kamijo ni Jasmine estaban pero a pesar de eso ellos les habían mandado un carro para que fueran las llevarán a casa. Había gran variedad, a pesar de la belleza de aquellos ropajes, las chicas iban a trabajar en modificaciones para hacerlos más a su gusto.

Como era de esperarse, Kaya se dio cuenta de lo que pasaba y no dudó en decírselo a Alexander con quien estaba enojada por lo de Kamijo pero ahora lo necesitaba de aliado.

-Así que Kami se va a comprometer con mi humana... Debí de haberlo matado.

-Tú lo haces y yo me encargaré de ti- respondió una Kaya decidida.

-Todo por tu obsesión por aquel infeliz...

-Y tú no te quedas atrás con la mustia de Flowery, querido... Pero quiero que les quede claro que conmigo nadie, pero nadie... Juega.

Kaya se fue con paso soberbio.

-¿A dónde vas?- le gritó Alexander.

-¡A arreglar los detalles para estar listos para la gran fiesta, Darling!- Respondió Kaya y finalizó con una temible risa.

Alexander se quedó sorprendido pues veía totalmente decidida a Kaya a hacer lo que fuera con tal de conseguir estar al lado de Kamijo por siempre, con o sin amor de por medio; incluso… hasta él sintió miedo de ella. Tanta era la obsesión de Kaya por Kamijo que incluso se le había quitado la costumbre de seducir jovencitas para conseguir sangre hermosa y joven y así conservarse bella en la eternidad.