14. Two For Tragedy

-Me da gusto ver que aún te acuerdas de mí pues tardé varios años en volver a casa.

-Así es... muchos.

-Pero el entrenamiento militar dio resultados y pues pude graduarme con honores mi querida Helena pues no te imaginas lo mucho que te extrañé.- Dijo un Mark muy alegre a una Helena algo extrañada.

-Eso me parece maravilloso Mark, me da mucho gusto por ti...

-Es muy tarde así que te acompañaré a tu casa, noté que salías de la casa de Hizaki... ¿cómo está ella?- Ambos empezaron a caminar juntos.

-Muy bien solo que como siempre sus padres están de viaje.

-Pobre... ¿y Teru? ¿Siguió con su romántica idea de ser pintor?

-Sí, sus cuadros se venden bien pues es talentoso aunque principalmente pinta en la casa de su prima para no dejarla sola.

-Me imagino... mañana los iré a ver.

-Será una agradable sorpresa para ellos.

-Así es, es una lástima que tu casa esté tan cerca, ya llegamos.

-Veo que recuerdas bien dónde vivo.

-¡Claro! No puedo olvidarme ni un detalle de una mujer tan hermosa…

-Bueno, luego nos vemos, ya es tarde. Cuídate.-Helena se metió de inmediato pues ese chico la hacía sentirse nerviosa.

Mark se trataba de un Philian que había pasado cuatro años fuera de su clan pues deseaba ser un militar respetado y las reglas eran que debía de pasar ese tiempo en un entrenamiento para poder tener su cargo, lo que nadie sabía era que él estaba enamorado de Helena y ahora regresaba decidido a ganar su corazón.

Vamaranth no había podido dormir en toda la noche, además que después de dejar la mesa de una forma tan repentina fue reprendida por su madre pero por suerte su papá había intervenido argumentando que era una niña pequeña que temía al matrimonio pues tampoco imaginaba la razón real de su amargura ante tal noticia. Amaneció con los ojos llenos de lágrimas pero su deseo de llevar todo en paz con su familia era lo que la obligaba a no hablar pues sabía la revolución que se crearía al decirles que estaba enamorada de un Philian y que por eso no deseaba casarse con Yuki. Cuando la llamaron a desayunar no respondió, ni siquiera se movió pues estaba arrinconada abrazando una manta por lo que Flowery fue a verla y de inmediato se acercó a ver lo que pasaba.

-¿Te sientes mal?

-Sí, es que creo que cayó algo mal.

-No me refiero a ese tipo de malestar, creo que no te gustó el compromiso con Yuki. ¿Tanto lo quieres?- Preguntó refiriéndose a Teru.

-Como no te imaginas, fue el único capaz de hacerme arrepentir de mi pensamiento de nada de matrimonio. Sin querer fue ganando mi amor con cada detalle, cada sonrisa, cada dulce mirada de sus ojitos azules. Cada vez que lo sentía cerca era como si mi corazón empezara a latir a la velocidad de un rayo y que detonaba en el rubor de mis mejillas.

-Nunca pensé que fuera tan fuerte…

-Pero ya nada importa… justo cuando me había enterado que sorprendentemente él también sentía lo mismo…

-¡¿En serio?!- Preguntó su hermana incrédula.

-Si… me lo dijo el día que me fui de su casa… quería que me quedara con él para siempre.

-¡No lo digas! Me vas a hacer sentirme culpable por ello.- Flow empezó a llorar al recordar la mirada triste de su hermana al alejarse de la casa de los Philian.

-Tú no tienes la culpa, esa es enteramente mía; jamás debí enamorarme de él porque de antemano debí entender que era imposible. Aún no logro entender cómo fue que se enamoró de mí… Scarlet es mejor de cierta forma…

-¿Quién es ella?

-Una Philian elegante como él, delicada y hermosa, no una niña malcriada y berrinchuda como yo.

-¡No eres eso!

-Claro que lo soy; y pensándolo de esa manera creo que fue lo mejor aunque me duela en el fondo de mi alma; recordaré su beso como si se tratase de un bello sueño… no más.

-¿Se besaron?

-Sí, pero eso ya no importa… diles a mis padres que me siento mal, pero no llamen al médico, diles que son cosas de mi pie herido y no de mi corazón roto.

-Vamaranth… de acuerdo.

-Gracias.

Flowery dejó sola con sus pensamientos a su hermana, pero de inmediato subió ara informarle que alguien la buscaba.

-¡Vam! Masashi te busca…

-¿Masashi?- De pronto recordó lo que Helena le había contado, lo más seguro era que quería hablar sobre ello así que se limpió las lágrimas y bajó de inmediato a verlo.

-¿A dónde vas niña?- Preguntó la señora Tarja.

-Masashi vino a platicar, ¿verdad que puedo salir a platicar en el parque?

-Está bien, no tardes mucho.

-De acuerdo mamá.

Ambos fueron silenciosos al parque y esperaron a que no hubiera tanta gente pues sabían que no tratarían sobre un tema que debiera ser escuchado por los demás. Mientras se dedicaron a hablar de cosas poco trascendentales como el clima o el pasto hasta que por fin se sintieron seguros pues la gente de alrededor se había marchado.

-Perdón por sacarte de tu casa pero era necesario pues tengo algo muy importante que decirte.-Inició Masashi.

-De acuerdo, puedes decirme con confianza, creo que ya no nos podrán escuchar.

-¿Sabes que ando con Helena?

-Sí, ella me lo contó.

-Pues bien… sé que no amas a Yuki pues a quien realmente quieres es al Philian.

-¿Ella te lo dijo?

-Sí, y pues sé que tal vez esté mal lo que estoy dispuesto a hacer porque Yuki es mi mejor amigo, pero tú también eres mi amiga y no quiero verte triste. Además que yo ya sé lo que se siente amar a alguien; más triste es estar con la persona equivocada. Bueno… todo esto viene a que Helena y yo te vamos a ayudar a que puedas volver a ver a Teru.

-¿En serio?- Lo miró una incrédula Vamaranth.

-Claro, mañana veré a Helena, hoy no puedo porque tengo algunas cosas que hacer con Yuki, pero prometo que pronto lo verás.

-¡Muchas gracias Masashi! Me has dado un poco,  de esperanza.

-De nada, te llevo a tu casa.

Por lo menos Yuki iba a estar ocupado aquella tarde por lo que por ese día Vamaranth iba poder estar tranquila pues no la iba a ir a ver. Ella realmente deseaba ver a Teru de nuevo y su hermana esperaba a que Kamijo cumpliera su palabra de irla a visitar, solo su hermana sabía que durante el día eso era imposible pero no podía decirle nada pues iba a empezar a hacer preguntas las cuales Vam no debía responder así que dejó que su Flowery siguiera esperándolo aunque solo pasara del medio día, si vendría sin duda sería al anochecer y a lo mejor Jasmine vendría con él.

La vida de Hizaki era tranquila, además que había notado a Teru un poco más tranquilo pero ignoraba que se debía a lo que le había comentado Helena. Seguía cuidando de sus rosas aunque de vez en cuando extrañaba a su extraña invitada pero debía de ser fuerte para que su primo también lo fuera. Scarlet iba cada día realmente para ver a Teru pero aquella mañana él aún no llegaba y eso era extraño pero Hizaki no le preocupaba por haberlo visto con más “vida” la tarde anterior, a lo mejor solo había dormido mucho y se le había hecho tarde, justificación que estaba correcta pues Teru, al pasar días en vela desde que Vamaranth se había marchado no había dormido y ante la ayuda de Helena pudo descansar mejor pues sabía que esto traería problemas y debía de tener todas las energías para enfrentarlos pero todo el valor con tal de estar cerca de ella. Scarlet impaciente porque su amado no llegaba a la casa de su amiga se ponía de mal humor, nunca se le había visto así hasta que Vam había llegado a esa casa, tal vez solo salió a relucir su verdadera personalidad que ocultaba para conquistar a Teru, pero realmente era posesiva y al ver su batalla perdida la hacía perder la razón además de no comprender el amor de Teru hacía aquella Thanatosian pues era por todos sabido que el padre del chico murió en manos de un cruel Thanatosian cuando era aún un niño pequeño, y que su madre entró en una gran depresión y se suicidó; poco después se encontró el cadáver de aquel cruel hombre pero nadie sabe lo que le pasó. Por supuesto los Thanatosian se desligaron de aquella acción terrible diciendo que aquel hombre había perdido la razón pues a pesar de no compartir ideas con los Philian jamás hubiesen matado a uno por puro capricho y que eso los obligaba a castigarlo fuertemente, tal vez ese fue su castigo, la muerte.

Kamijo por su parte, tenía la firme intención de seguir frecuentando a Flowery pero dudaba si realmente la dejaran pues solo podía ir durante las noches; pero Jasmine se ofreció a acompañarlo para que no pusieran objeción, de cualquier forma él ya no era Philian, lo fue, pero renunció a ello y nadie se acuerda pues habían pasado varios años. Jasmine tenía la imagen de una Thanatosian pero nunca perteneció a ningún clan ni siendo humana; siempre neutral pero no negaba que le agradaba la forma de vestir de las damas Thanatosian pues la de las Philian lo creía una forma muy “luminosa” para ella; ella siempre tratando de convencer a su compañero que debía de luchar por el amor de su dama, que no debía de importar lo que fuera pues él no era un vampiro de forma intencional; lo vieron solo un grupo de aquellos demonios hambrientos y lo atacaron, sin embargo, al tratarse de novatos tuvieron miedo a Jasmine cuando llegó a ver lo que ocurría pues de inmediato se notaba que ya era una vampiresa experimentada y huyeron, ella al ver a aquel joven casi muerto decidió darla una segunda oportunidad convirtiéndolo en un vampiro como ella para después enseñarle que no todos los seres como ellos era sanguinarios y malignos. Ella en ese entonces vivía con Kaya quien al ver al nuevo integrante de aquella familia se obsesionó al ver su belleza y elegancia, pero Jasmine de inmediato se dio cuenta y la corrió. Kaya no era un vampiro cualquiera, era muy temible, ambiciosa y cruel, incluso sus dientes no eran como los demás; a simple vista eran muy humanos pero a la hora de alimentarse absolutamente todos presentaban una punta muy filosa y puntiaguda pero obedecía a Jasmine por ser más antigua que ella y eso equivalía a tener más poder. Kaya al verse sola y abandonada creó a quien sería su brazo derecho, Alexander, con él cual ideaba la forma de separar a Flowery de Kamijo.

Llegando la tarde, cuando Jasmine y Kamijo estaban por salir para ir a ver a Flowery se llevaron la desagradable sorpresa de ver a Kaya quien saludo con una intolerable sonrisa.

-Te dije Kami que ya no te iba a dejar tanto tiempo.- Habló aquella temible vampiresa.

-¿No entiendes que no me gusta que estés cerca de mi?- Preguntó un molesto Kamijo.

-¿No entiendes que lo voy a estar aunque te niegues?... Veo que van a salir ¿Puedo acompañarlos?

-Claro que no, sabes que no eres bienvenida en nuestras actividades mi nada querida Kaya- Jasmine respondió de inmediato ante aquella indiscreta pregunta.

-No hablaba contigo honey, sino con mi encantador príncipe de la oscuridad.

-Pues entonces soy yo que te dije que te vayas de una vez- Intervino Kamijo.

-Pero volveré darling así que espérame pronto.

Una vez que Kaya se marchó al fin pudieron salir rumbo al pueblo de los Thanatosian pero ni se imaginaban que Kaya junto con Alexander iban siguiéndoles el rastro.

-Buenas noches.- Saludó Kamijo cuando la señora Tarja abrió la puerta después que llamaron la puerta.

-Buenas noches Kamijo, Jasmine. Me da mucho gusto verlos, llamaré a mis hijas.

Flowery fue la primera en bajar al enterarse que Kamijo estaba en su casa, cumplía su promesa de irla a ver. Después apareció Vamaranth a saludar; Kamijo pidió permiso para que los cuatro salieran a dar un paseo y Tuomas accedió. Vamaranth le sugirió a Jasmine que ellas se fueran aparte y ella aceptó con una sonrisa de complicidad ante tal idea.

-Me da gusto que mi hermana se lleve muy bien con Jasmine, creo que la hara bien conversar con ella pues no se siente bien por lo de su compromiso con Yuki.

-Y ella a quien quiere es al Philian... lo noté desde que fuimos por ella a esa casa. Yo me moriría si me alejaran de ti así que ha de ser terrible lo que ha de sentir, pero debes de tener en cuenta que si su amor es verdadero cruzará cualquier obstáculo por muy alto que sea.

-Quiero ayudarla pero no sé cómo, no sabes cuánto quiero decirle que te amo y que soy feliz porque estoy contigo pero temo que a ella le dolerá por no correr con la misma suerte. Realmente quiero que ella se vuelva en la confidente de este amor.

-Nunca quiero alejarme de ti… ¿estarías dispuesta a todo por estar conmigo?- Preguntó de pronto un Kamijo serio.

-¡Claro! Te amo con locura, y jamás lo dejaré de hacer porque algo dentro de mí me dice que esto es eterno…

-Así es… eterno…

Kamijo besó los labios de su compañera para sellar el amor que se tienen, la chica en ese momento se olvidó de la situación difícil de su hermana para ser feliz aunque fuera en ese momento. Estaban tan al pendiente el uno del otro que no se percataron de la presencia de alguien más a los alrededores; ni Jasmine pues ella junto con Vamaranth se habían alejado lo suficiente para no saberlo, Kaya y Alexander estaban mirando a la pareja.

-¡No puedo creer que mi hermoso Kamijo esté con esa insípida humana!- Decía una molesta Kaya.

-Pues déjame decirte que de insípida no tiene nada… es bastante hermosa…- Le respondió su compañero mirando fijamente a Flowery.

-Pues ya sabes dónde encontrarla, si tanto te gusta deberás venir. Te diré que Kami sale a cazar dos veces por semana así que sabrás cuando venir… ¡la quiero lejos de él!

-Sera un honor Kaya, esta vez no quiero a esa humana de alimento… la quiero como mi compañera… ¿Te imaginas una cita doble?- Preguntó un sarcástico Alex.

-¡Qué horror! Yo a esa no la quiero ver lejos de mi Kami, y si tú no te puedes hacer cargo de esto; tendré que eliminarla –Hizo una pausa aterradora- …para siempre.

-¡Eres una dramática! Ya no me verás entonces.

-Para lo poco que me importa Darling… puedes hacer de tu asquerosa vida lo que se te dé en gana, yo solo quiero a Kamijo… pero bueno… sé que escondes a dos prostitutas en tu casa, tengo sed.

-Está bien… te comparto la sangre de una… ¿quieres divertirte? Una de ellas gusta de mujeres también.

-De acuerdo, todo sea por jugar un rato con la comida.