48. Simmetry Breaking

¡Y que me adelanto! Pero solamente porque ya llevo incluso un avance del de la otra semana, de otra forma estaría sufriendo. Por cierto, refiriéndome a la otra historia... las propuestas de localidad han sigo Holanda, Inglaterra y también propongo (¿por qué no?) al DF (?) Así que pueden ayudarme a decidir. Pero en fin, vamos con el capítulo, aunque creo que este viene medio de relleno, prometo que ya el otro se pone bueno, al menos lo que llevo si fue de OMG! (?) Ok, nop. Espero me digan cómo les parece, lo que ven mal y lo que ven bien (historia, redacción, ortografía, etc)

Sinéad llegó después de haber estado fuera un tiempo, al primero que vio fue a Yuki por lo que inmediatamente corrió a interceptarlo, aquel al verla intentó escapar pero evidentemente no pudo. La pelirroja lo sujetó entre sus brazos y el Thanatosian por más que trataba de liberarse no tenía éxito, e incluso le plató un beso en los labios. Yuki, desconcertado y aprovechando que la vampiresa había dejado de presionarlo tanto al besarlo logró alejarla con un fuerte empuejón.

-¿No te gustó amor? –Preguntó Sinéad –Te extrañé mucho ahora que estuve lejos pero tenía mucha sed y me busqué un lugar muy alejado para beber, ya somos muchos vampiros en este lugar. Pero tú… me recibes de esta forma tan… fría…

-Porque no me interesas, debo irme.

-¡Eres un idiota! –Gritó Sinéad cuando Yuki se alejaba. Estaba muy molesta y dio la vuelta pero estaba tan furiosa que no notó que alguien más estaba mirándola.

-¿Zin? –Dijo la pelirroja con cierto temor, Zin la observaba con los brazos cruzados y ojos altivos.

-¿Molestando a Yuki de nuevo? En verdad no te entiendo… -Decía desconcertado. –Está bien que te guste Yuki, él es libre pero sé que también estás tras Teru y debes de recordar que él está comprometido.

-Pero su prometida está perdida…

-Quizá pero mientras haya esperanza no romperá dicho compromiso… -Zin creyó conveniente no decirle aún que Vamaranth había aparecido.

-¿Sabes algo? –El tono de Sinéad había cambiado –Ninguno de ellos me interesa sinceramente, los quiero para pasar el rato, para demostrarme a mí misma que sigo siendo hermosa y puedo conseguir a los hombres que yo deseé; y no puedo soportar la idea que una niña sin chiste que ni siquiera aparece sea la causa por la cual ninguno me ame.

-Si sigues así, ninguno de ellos te va a amar.

-Eso me tiene molesta, y más porque a quien amo de verdad ni siquiera me aprecia ni un poco.

-Entonces… ¿por ese rechazo estás buscando consuelo en otros brazos? Encontrarás a alguien, o igual si lo propones esa persona que tando anhelas pueda corresponderte.

-No lo entiendes, todos lo hacen menos tú –Ella se acercó a Zin y lo abrazó, aquel le tenía cariño pues durante un tiempo fue su única compañía después de encontrarla malherida.

-¿Qué no entiendo?

-La persona a la que amo se enamoró de alguien más y ese dolor me está destrozando de poco… -Zin permaneció callado –Porque no entiendes de una vez que yo te amo, que siempre te he amado desde que te conocí, siempre estabas para mí hasta que llegamos aquí y la conociste. No sabes cuánto la odio, a Hizaki y a Vamaranth.

-¡No digas eso! –Zin la soltó –te aprecio mucho pero no podría amarte pues alguien Hizaki es todo para mí, lamento mucho esto pero no debes odiarla, no tiene la culpa que yo la ame y ni siquiera sé si ella siente lo mismo.

-¡Pues seguro lo hace! Si la tratas como a una princesa de porcelana, la cuidas a cada momento ¡y eso me enferma! –Empezaba a llorar, por primera vez Sinéad mostraba debilidad. –¡La odio!

-¡Calla!

-¡Hizaki y Vamaranth! (Si la última aparece) pagarán caro por causar que me desprecien.

Dicho lo último, Sinéad se marchó de nuevo, Zin se sintió culpable pero no podía mentirle diciéndole que la amaba pues no era lo mejor para nadie. Recargando su brazo en un muro y su cara en su él pensaba en una forma de solucionar lo que había hecho, Jasmine lo encontró preocupado.

-Déjala –Le dijo la vampiresa –Ella sabrá lo que hace, además que no actuó de buena forma y debe de tener su lección para que aprenda. –Le dijo tranquilamente a Zin. –Kamijo te busca.

-Gracias.

Zin se había dado la vuelta para ir donde Kamijo pero recordó algo que Sinéad le había dicho, sobre que odiaba a Vamaranth, analizó que cuando la menor de las Olsson fue mordida por Kaya sólo Sinéad estaba con ella, sí la habían encontrado herida pero si sabiendo cómo era Sinéad y lo que había escuchado de Kaya sabría que aquel encuentro debió de haber terminado fatalmente, un vampiro se recupera de sus heridas fácilmente. Jasmine notó que Zin se había detenido y le preguntó si le ocurría algo a lo que él le contó lo que había pasado, Jasmine lo escuchó con atención.

-Será importante que se lo comentemos a Kamijo de inmediato, si tus sospechas son ciertas Sinéad puede ser aliada de Kaya… ¿le dijiste que Vamaranth está aquí?

-No, algo dentro de mí me hizo darle a entender que aún estaba desaparecida así que no sabe, y creo que ni se percató porque si pudo detectar algo de su olor, fue el de Jane Doe, no de Vamaranth.

-¡Perfecto! Hiciste bien, tienes buenos instintos. ¡Vamos!

Yuki fue a buscar a Vamaranth, pero no la encontraba, deseaba hablar con ella pues la extrañaba mucho, fue a tocar a la que era su habitación pero nadie respondió, iba a ir a ver a Teru por si la había visto, llamó pero nadie le respondió, notó que la puerta no tenía seguro y vio al peliplata en la cama sobre Vamaranth, ambos en ropa interior besándose apasionadamente; cerró la puerta al saber lo que pasaría y decepcionado pues a pesar de todo aun la amaba se alejó. Mientras caminaba por los pasillos de aquella mansión, algo molesto pues a pesar de saber sobre los sentimientos de Vamaranth era difícil imaginar lo que hacía con Teru. Vio que Flowery estaba buscando a alguien  imaginó que también buscaba a su hermana.

-¡Yuki! Hola –Saludó la chica -¿No has visto a mi hermana?

-Hola Flowery, la vi hace poco y creo que está algo ocupada.

-Me gustaría hablar un rato con ella… hasta preparé café… para mí obviamente jejeje. Si dices que está ocupada, ¿gustas café? Con gusto prepararé más. La noche apenas empieza así que seguro se desocupa a buen tiempo antes del amanecer.

-De acuerdo, acepto tu invitación. ¿Y Kamijo?

-Está hablando con Zin y Jasmine, creo que es algo relacionado a Sinéad pues lo poco que escuché es que es muy posible que sea aliada de Kaya.

-¿En verdad? ¿Y dónde anda?

-Pues se marchó porque discutió con Zin, no sé aún porqué pero que se indignó demasiado y se fue.

-¡Por fin se fue la acosadora!

-Jajajaja Cierto… recordé que te acosaba, y a Teru también…

-¡Ni me menciones a Teru en este momento! Estoy molesto con él.

-¿Y eso?

-Por una estupidez que no debe afectarme, pero lo hace. Pero mejor vamos por el café… ¿no tienen algunas galletas?

-¡Claro que sí! Helena y Hizaki hicieron unas muy buenas...

Kamijo al terminar de hablar con los demás fue a buscar a Flowery a su cocina, al verla la abrazó por la espalda para que ella no se levantara de su silla donde comía algunas galletas.

-Pensé que tardarías más –Mencionó Flow.

-No, pero advierto que hay que tener cuidado con Sinéad, si la ven a los alrededores deben de decirme, o a Zin o Jasmine. Por suerte Zin fue cuidadoso y no le dijo que Vamaranth estaba aquí porque si son correctas nuestras especulaciones seguro le diría a Kaya y aún no sabemos cuáles fueron las intenciones de ella al convertir a tu hermana. Hay que ser cuidadosos, sabemos que Kaya suele ser muy cruel.

-¿Oigan? –Interrumpió Masashi quien estaba del otro lado de la cocina con Helena. –Había estado pensando en algo.

-Habla Masashi. –Aprobó Kamijo.

-Kaya hizo de Vamaranth un vampiro, Kaya necesita a un “receptor” para su invocación, alguien a quien pueda controlar. Vam, sino fuera por la poción que Haruka le dio, Kaya sabría su ubicación y hasta podría controlar un poco, entonces… ¿y si Vamaranth es su “receptor”?

-No lo había pensado de esa manera –Observó Kamijo –Pero tu punto de vista es interesante y nada descabellado. Por lo tanto, es necesario que si notan algo raro me lo hagan saber, Vam es muy inexperta para defenderse por sí misma.

Vamaranth salía de la habitación de Teru cuando encontró a su tía que pasaba en ese lugar; Anette miró a su sobrina y fue hacia ella, le acomodó el moño del vestido que usaba en ese momento y la miró detenidamente, por primera vez veía tan de cerca aquellos ojos bicolor, percibió el patrón atigrado con el fondo rojo  rayas negras pues a los lejos sólo se veían los colores y no las líneas, e incluso su iris parecía un poco más grande; Vamaranth agachó su mirada muriéndose de pena pues Anette la había visto salir de la habitación de Teru.

-Yo… -Dijo la chica titubeante.

-No te preocupes, no está mal lo que haces. Vamos, todos están hablando de algo importante.

Teru salió después de Vamaranth aún con la cara roja como una manzana y el cabello algo desalineado; miró a Anette y trató de regresarse a su habitación pero la señora le hizo con un gesto que no lo hiciera, que ella entendía.

-Le decía a mi sobrina que no tengo problema con lo que hacen, pero deberías de peinarte mejor. –Anette reía. –Le decía a Vami que debemos ver a los demás, están tratando de temas importantes.

-¿Kaya? –Preguntó el peliplata.

-No sólo ella, pero es mejor que se los digan ellos.

Yuki miró a Vamaranth con cierta melancolía y con ira a Teru quien entró tras ella, respiró hondo y procuró calmarse, Anette llegó con ellos también. Kamijo les contó lo de Sinéad y también sobre las sospechas de Masashi al pensar que Vam pudiese ser el receptor que buscaba Kaya.

-¿Yo? Sinceramente no lo creo posible…  -Decía Vamaranth.

-Será mejor que preguntemos a Charlotte si puede ser un vampiro, yo sólo he escuchado casos en humanos, aunque eso no le quita probabilidades, es una buena observación por parte de Masashi. –Mencionó Anette. –Mandé una carta a Tuomas para que retrasen su regreso lo más que se pueda, sé que ellos están más tranquilos que yo esté aquí.

-¿Cuánto crees que puedas retrasarlos? –Preguntó Flowery –Si vienen es posible que ellos también puedan estar en peligro.

-No por mucho, los negocios terminaron y al parecer están de vacaciones, insistí en que deberían de aprovechar el momento para que Tarja pase más tiempo con su padre y sé que Tuomas no se despegará de ella.

-Me parece perfecto –Kamijo estaba de acuerdo en la medida de Anette. –Pues bien, por favor Vam, cuídate mucho y si sales, que sea conmigo, con Jasmine o Zin; eres buena peleando pero te falta demasiado por aprender.

-Lo entiendo.

-Bien, si no les importa… -el tono serio de Kamijo había desaparecido y tomó de la mano a Flowery. –Necesito un momento a solas con mi prometida. Están en su casa.

Kamijo salió con Flow y se marcharon. Yuki miró hacia Vamaranth quien estaba jugueteando con Teru., la chica lo miró y lo notó algo triste, le dijo algo al peliplata y se acercó al Thanatosian.

-Hola… ¿Cómo has estado? –Preguntó Vam.

-Pues estoy que ya es algo.

-¿Qué tienes?

-Tú…

-Pero si ya habíamos hablado sobre ello, sabes perfectamente que…

-¡Lo sé! Pero… -En ese momento Yuki miró que Charlotte había llegado.

-¡Hola! –saludó la hechicera –Kamijo me abrió así que por eso estoy aquí. Dijo que había algo que debías decirme –Se dirigía a Masashi.

-¡Oh! Es sobre el receptor que Kaya necesita.

-De acuerdo.

Masashi comentó, con ayuda de Zin, sobre lo que pensaba mientras Charlotte se quedaba algo pensativa, hasta que al final les dio la razón mencionando que era un buen análisis. La hechicera quedó en preparar más poción de “no rastreo” para Vamaranth, también comentó que había encontrado a Haruka, que le dijo que la acompañara pero que ésta se había negado mostrando esa misma actitud orgullosa y arrogante de siempre. Vam se preocupó por ella pero tenía temor de verla de nuevo, debía de entender que jamás la amaría.

Charlotte al terminar, dirigió su mirada hacia Yuki; triste, sentado en un rincón perdiendo su vista en algún punto inespecífico de la pared contraria de donde estaba Vamaranth con Teru, el Philian la abrazaba y era como si Yuki no quisiera ver aquella escena.

-¿Qué te ocurre? –Preguntó Charlotte dulcemente a Yuki.

-Me molesta verlos tan melosos juntos, sé que se aman pero es algo que no tolero.

-Vayamos a otro lado entonces, el castillo es grande como para que estés aquí mirándolos.

Ubicaron la biblioteca, el lugar donde Kamijo tenía su piano y decidieron entrar. Tomaron asiento en los sofás.

-Así que amas a Vamaranth –Le dijo Charlotte con una voz apagada a Yuki.

-Sí, desde que éramos niños sentí algo muy fuerte por ella. Siempre estuvimos juntos aunque para ella siempre fui su mejor amigo, su hermano. Después crecimos y con ello mi amor por ella y sé que yo no le era tan indiferente pero conoció a Teru y todo se vino abajo. –Hizo una pausa –Para serte sincero, odiaba a Teru pero al conocerlo mejor me di cuenta que es una buena persona pero me sigue molestando su presencia porque sigo celoso porque él tiene lo que yo jamás tuve; a pesar de haber esto comprometido con Vam.

-¿En verdad ustedes dos estaban comprometidos?

-Sí, pero el día de nuestra boda todo se fue al diablo. Me la pasé realmente mal y lloré como estúpido toda esa noche. Es cuando los Olsson dejaron la aldea Thanatosian. Realmente es una historia muy larga.

-Me imagino. Pero tienes todo el derecho del mundo de rehacer tu vida.

-Lo sé, pero no puedo olvidarla…

-Te propongo algo… ¿qué te parece si mañana salimos a algún lado?... Antes que despierten los seres nocturnos jejeje. –Charlotte se había ruborizado y Yuki la notó aún más encantadora. –Me agradas Yuki y tengo interés en conocerte mucho mejor pero todo depende si quieres.

-Mañana en la tarde ¿está bien?

-¡Cuando quieras está perfecto! A las cuatro aquí afuera. Debo irme.

-De acuerdo, mañana nos vemos.

Yuki se sentía mejor al estar con Charlotte, era como si una aparente calma lo invadiera cuando ella estaba presente. Al ir a la sala de estar después que Charlotte se fuera, encontró a Teru y estaba sólo, tenía una hoja de papel y estaba trazando unas líneas con un trozo de carboncillo. El Thanatosian se acercó a mirar y notó que lo que se dibujaba era  el jardín de rosas del castillo de Kamijo.

-Yuki… -Teru notó la presencia del otro chico. -¿Qué ocurre? ¿Puedo ayudarte en algo?

-No… sólo pasaba por aquí y quería ver que era lo que dibujabas. ¿Dónde está Vam?

-Sintió esa terrible sed y fue a buscar dónde alimentarse, Jasmine y Zin fueron con ella por lo que me deja un poco más tranquilo.

-Ya veo. Ha de ser difícil que tu novia necesite tan peculiar alimento para vivir.

-Lo sé, pero ha de ser aún más difícil para ella pues es la que sufre todos los cambios. Hay que apoyarla mucho.

-Lo siento mucho.

-¿Por qué te disculpas?

-Porque eres una buena persona pero aún siento rencor hacia ti. Pero definitivamente eres el hombre que Vam necesita a su lado.

-Supongo que gracias… -Hizo una pausa –Por cierto, te ves bien con Charlotte.

-Espero que no lo digas por lástima.

-¡No! ¡Para nada! Lo digo porque es cierto, ella es muy bella y parece ser una buena persona.

-Puede…

Cuando llegó la hora, Yuki esperaba a Charlotte, le había pedido permiso a Kamijo de cortar una rosa roja del jardín y éste había accedido gustoso, tanto que le ayudó a elegir la que sería la más hermosa. Kamijo era quien podía despertar un poco más temprano por lo que ayudó a Yuki a vestirse de forma apropiada para una cita. El Thanatosian se alegró que Teru hubiese salido con Hizaki, Helena y Masashi pues sabía que le haría bromas respecto a su cita con Charlotte. A pesar de todo, él estaba algo intranquilo y Kamijo lo notó a pesar de estar buscando un abrigo adecuado pues el viento de otoño empezaba a enfriar un poco el ambiente.

-Estás muy pensativo. –Comentó Kamijo.

-Es que sé que sólo es una cita para conocernos pero ella tiene 160 años y luce radiante. Si se da algo… ¿qué pasará cuando yo me vuelva un anciano y ella siga igual? Digo, aún amo a Vamaranth pero con ella también aplicaría lo de quedarse como está por siempre.

-Mira, es cierto que seguirán iguales a través del tiempo. Los hechiceros, según tengo entendido, detienen su edad a voluntad donde deseen; muchos muy poderosos tan sólo parecen unos niños y serán así por siempre. Aunque una vez que lo deciden, jamás podrán cambiar, sólo temporalmente bajo un hechizo. En el caso de los vampiros, la edad en la cual dejas de ser humano es la que se conserva. Sólo hay una opción posible para ti y creo que la sabes, porque para ser hechicero hay que nacer como tal. Yo tenía 26 años, y estaba comprometido con una mujer muy bella pero hueca por dentro y me negaba. Ella me deseaba pero jamás me  amó. Después conoció a otro hombre y se casó.

-¿De dónde eras?

-Yo era un Philian pero al igual que Flowery, no me gustaba mi clan (aunque ella es o era Thanatosian). No estaba de parte de ninguno pues en ambos habían cosas que no me parecían bien.

-Entonces ¿Esa mujer se olvidó de ti?

-Así es, y yo de ella. Pero déjame decirte que tenía un leve parecido a Hizaki, quizá la chica sea pariente o incluso su bisnieta. Si es así, afortunadamente no heredó su soberbia y vanidad. Pero quien sabe, jamás conocí el apellido del que fue su esposo así que jamás estaré seguro.

-Vaya, eso no sabía de ti.

-Nadie lo sabe, ni siquiera Jasmine. Pero bueno, sólo quiero decirte que quien te ame, lo hará pese a todo.

-¿Cómo Flowery te ama?

-Así es, jamás amé a alguien hasta que ella apareció en mi vida. Antes no tenía voluntad para vivir en mi eternidad, sólo deambulada buscando una razón para existir más. Tuve tantos pensamientos donde quería que ya terminaran con mi sufrimiento; pero ahora que la tengo, ha sido como un renacer que ni siquiera tuve al convertirme. –La mirada de Kamijo se perdió en un momento al recordar los bellos ojos de su amada.

-¿La convertirás?

-No deseo que pase por lo mismo que yo pero ella me lo pide a cada momento. Pero antes quisiera ponerle un alto a Kaya pues me gustaría darle tranquilidad para que pueda controlarse mejor. Ya vez que Vamaranth ha tenido que pelear contra ghouls; pero yo no deseo eso para Flowery. Quiero que su mundo sea como pétalos de rosas. –En fin… -Kamijo tomó un abrigo ligero y negro –Toma este y sal porque ya es hora, ella ya está esperando, acabo de oler su perfume.

-Muchas gracias.